Por Jorge A. Cuello
El pueblo uruguayo amaneció el domingo con la responsabilidad cívica de participar en una segunda vuelta electoral que aparecía muy reñida pero que terminó consagrando ganadora con un 49.8% de los votos a la fórmula presidencial del Frente Amplio Yamandu Orsi y Carolina Cosse frente a los 45.8% de los votos de Alvaro Delgado.
Todas las encuestas previas reflejaban una tendencia a favor de Orsi con números que superaban en 1 o 4 puntos porcentuales al candidato de la actual coalición de gobierno de derecha Álvaro Delgado.
Y la tendencia se mantuvo al final de la jornada electoral con una diferencia de casi 100 mil votos a favor del hombre que gobernó el Departamento de Canelones durante 10 años como Secretario General en la gestión de Marcos Carambula y luego 10 años como Intendente.
A partir del triunfo en las urnas, el Frente Amplio con el presidente electo a la cabeza, estará abocado a ordenar a la fuerza política para asumir el cuarto gobierno de su historia y conformar el gabinete de ministros y funcionarios que tendrán que asumir la responsabilidad de gobernar Uruguay a partir del 1 de marzo de 2025.
Entre los temas centrales de la futura gestión estarán en agenda aquellos asuntos relacionados con el impulso al desarrollo y el crecimiento de la economía, la distribución del ingreso, el acceso a la salud, la vivienda y el empleo joven, la seguridad ciudadana y la lucha contra la pobreza infantil.
Una jornada ejemplar al cierre del comicio
Tras conocerse los resultados provisorios y habiendo Álvaro Delgado reconocido su derrota, Yamandu Orsi y su vicepresidenta Carolina Cosse salieron a celebrar junto al pueblo frenteamplista que se congrego en las inmediaciones del Hotel NH Columbia.
En ese acto la vicepresidenta electa aseguró que la democracia goza de buena salud y envió saludos a los compatriotas que votaron por la otra fórmula presidencial.
En simultaneo Alvaro Delgado se dirigía a sus seguidores del Partido Nacional y a los aliados en esta contienda electoral para reconocer su derrota y afirmar que nadie tiene mayorías absolutas y por lo tanto el presidente va a tener las llaves para construir y tejer los grandes acuerdos nacionales que necesita Uruguay.
Por su parte, Yamandu Orsi, en un discurso muy encendido, agradeció al pueblo uruguayo el apoyo recibido en las urnas y en particular a la militancia frenteamplista que dejó todo en la cancha a lo largo y ancho del país.
Señaló además que había triunfado “el país de la libertad, la igualdad y la fraternidad” y que “para construir el Uruguay que todos soñamos vamos a necesitar también del apoyo de quienes hoy se sintieron derrotados”.
También auguro que “el sistema político uruguayo se ha consolidado tras 40 años de democracia” y sostuvo que “los partidos políticos son fundamentales para garantizar la institucionalidad”.
Señalo además que va a ser el presidente que convoque al diálogo nacional, por supuesto que con nuestros planteos pero siempre escuchando.
Y dijo que “vamos a construir un país integrado y más allá de las diferencias nadie podrá quedarse atrás desde el punto de vista económico, social y político”.