Este sábado, una multitudinaria marcha del colectivo LGTBIQ+ recorrerá el centro de Buenos Aires en rechazo a las recientes declaraciones del presidente Javier Milei, quien vinculó la homosexualidad con la pedofilia en su discurso en el Foro de Davos. Organizaciones sociales, sindicales y políticas anticipan una convocatoria sin precedentes en defensa de la diversidad y los derechos humanos.
La movilización, convocada por la Comisión Organizadora de la Marcha del Orgullo y otros espacios, partirá a las 16 horas desde el Congreso de la Nación con destino a Plaza de Mayo. Según anticipó la activista y docente universitaria Manu Mierelles, se espera una «marcha histórica y masiva», en respuesta al avance de discursos de odio desde el Gobierno nacional.
Un reclamo con respaldo multisectorial
En la previa del evento, el Gobierno de Milei calificó la movilización como un acto «político», intentando minimizar su impacto. Sin embargo, la marcha cuenta con el respaldo de un amplio espectro de actores sociales y políticos. Desde la CGT y la CTA hasta referentes de organismos de derechos humanos como Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, diversas entidades confirmaron su adhesión.
Entre las figuras políticas que se manifestaron en contra de las declaraciones de Milei se encuentran la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, la referente de la Coalición Cívica Elisa Carrió y el gobernador bonaerense Axel Kicillof. La expresidenta calificó el discurso libertario como «pura sanata», mientras que Carrió aseguró que las palabras del mandatario «violan la Constitución Nacional».
«El orgullo se defiende»: una consigna clara contra el fascismo
La convocatoria, además, se extiende a nivel federal. Desde diversas provincias se organizaron marchas simultáneas bajo el lema «La Patria no se vende, el orgullo se defiende», en clara oposición al mensaje presidencial. El bloque de diputados de Unión por la Patria también anunció su participación en la protesta.
«Este sábado marchamos en todo el país con una consigna clara y firme: no al fascismo, no a los discursos de odio», expresaron desde el Frente Grande.
La movilización representa un fuerte mensaje de resistencia y unidad del colectivo LGTBIQ+ y sus aliados frente a un Gobierno que, lejos de promover la inclusión, ha optado por discursos que generan rechazo tanto a nivel local como internacional. La respuesta en las calles será un reflejo del compromiso social con la diversidad y los derechos humanos en Argentina.