En los últimos meses, una nueva ola delictiva ha encendido las alarmas en las estaciones de servicio de todo el país. Según el Lic. Marcelo Puella, Magister en Seguridad e Inteligencia de Estado, esta preocupante tendencia ha convertido a estos establecimientos en objetivos fáciles para los delincuentes, quienes han desarrollado diversas modalidades de robo, aprovechando la falta de seguridad en estos puntos.
Las estaciones de servicio, que aún manejan grandes sumas de dinero en efectivo, se han convertido en un blanco predilecto para los asaltantes. Los trabajadores de estos lugares, comúnmente conocidos como playeros, se ven expuestos a robos constantes, donde los delincuentes, en cuestión de segundos, logran apoderarse de dinero, celulares y pertenencias personales, tanto de los empleados como de los clientes que se encuentran cargando combustible. En los casos más graves, incluso ingresan a los minimercados anexos, saqueando cuanto encuentran a su paso.
El robo piraña, una modalidad en la que los delincuentes actúan en grupo para despojar rápidamente a sus víctimas, es uno de los métodos más utilizados. Esta forma de robo, que se ha extendido por diversas localidades del país, ya no se limita a provincias como Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, Chaco, Santiago del Estero, La Rioja y Tucumán. Ahora, el conurbano bonaerense también está siendo afectado por esta creciente inseguridad.